Cuando se trata de dar un cambio look, las mechas siempre serán la primera opción. Y es que, más allá de tendencias y de gustos personales, el color de los ojos, el tipo de cabello y el tono de piel y la base de la melena son factores que ayudarán a dar con las mechas más favorecedoras. Desde rubias, bronde, avellana, cobrizas, y hasta canela y chocolate.
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Las mechas según el tono del cabello
Las mechas para las rubias dependerán de la intensidad del rubio base del cabello. Para lograr una base clara natural se debe usar tonos como el rubio nórdico o vainilla, para los tonos medios y oscuros, ceniza, arena, dorado y miel.
Las mechas para las castañas son aquellas que combinan perfectamente con los rubios cálidos como el miel, el dorado y el caramelo.
Las mechas para las morenas son ideales en tono caramelo, así como las de tonos rojizos o cobrizos. Además, en tonos oscuros se pueden usar tonos sutiles, como el chocolate.
Las mechas según el tono de piel
Las mejores mechas para las pieles pálidas son los rojizos, cobrizos y rubios y castaños cálidos, ya que ayudan a dar un favorecedor contraste.
Las mechas para las pieles blancas son aquellas que buscan dar un equilibrio al ser un tono de piel frío y claro. Algunos tonos que contrastan y aporten mucha luz, aunque algunos rubios pueden combinar con algunos tonos de ojos claros. Los castaños claros con mechas miel o doradas, así como tonos fantasía como el rosa anaranjado son ideales para este tipo de pieles.
Para aquella piel de color beige se ve más favorecida con rubios cálidos, y tonos de gamas de naranja y rojizos. También combinan los castaños más iluminados, ya sean en tonos rubios o cobrizos.
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Las mechas según el color de ojos
Para los ojos azules, las mechas que más combinan son las de color chocolate, ya que logran contrastar y dar mucho color. También ayudan a favorecer las mechas balayage o castaños iluminados.
Los ojos verdes son aquellos de los más versátiles porque se les puede sacar provecho con todo tipo de tonos de cabello. Los rubios, en especial los dorados. En segundo lugar, los castaños iluminados y hasta el pelirrojo.
