Jennifer Love es una joven de 25 años que gana miles de dólares al mes gracias a un inusual trabajo: usuarios le pegan para que ella los insulte. La mujer señaló que trabaja cerca de dos días a la semana, por unas dos o tres horas y gana cerca de 9 mil dólares mensuales.
¿Cómo llegó a trabajar en eso?
Según consigna The Sun, la joven trabajaba como mesera. Sin embargo, la pandemia por covid-19 le ocasionó problemas económicos, por lo que un amigo le hizo una singular sugerencia.
Esta consistía en que se creara un OnlyFans, pero solamente para sacarle fotografías a sus pies. Ella le hizo caso y comenzó a hacer esto.
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Sin embargo, con los días empezó a recibir mensajes de algunos de sus seguidores, que no solamente querían ver sus pies: querían que ella los insultara.
De esta manera, comenzó a cobrar 40 dólares por un video de 10 segundos de sus pies, 150 dólares por un video personalizado en donde ella insulta a por tres minutos y 1.000 dólares por videollamadas de 10 minutos para insultar al usuario que pagó por eso.
“Mucha gente me ha criticado diciendo que me estoy aprovechando de los hombres vulnerables y que debería avergonzarme. Pero es su problema ser ridiculizados y regalar su dinero”, afirmó Love.
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En ese sentido, indicó que “me encanta la libertad que obtengo de mi trabajo, puedo trabajar tan poco y tan a menudo como quiera y me siento empoderada”.
¿En que consiste el trabajo?
“Voy a mi habitación los viernes y sábados por la noche con todo mi maquillaje, veo la televisión y solo espero a que lleguen los clientes”, señaló Love.
Sobre qué les dice a los clientes que la contratan, manifestó que “tengo que burlarme y ridiculizarlos. Los llamo patéticos, les digo que soy demasiado bueno para ellos y que deberían darme todo su dinero”.
La mujer relató que la mayoría de sus ingresos los gana el fin de semana, cuando los hombres llegan borrachos a sus casas tras salir a fiestas y piden ser insultados.
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“Tengo muchos hombres de negocios mayores y también hombres más jóvenes que tienen demasiado tiempo libre. Una vez incluso tuve una cliente mujer. Me sorprendió mucho, no esperaba ver a una mujer al otro lado de la cámara”, expresó.
Por último, Jennifer señaló que “estoy en una relación y mi pareja me apoya mucho en lo que hago”, indicando que sus padres también saben a lo que se dedican.
“Obviamente, mi madre preferiría que me convirtiera en neurocirujana, pero lo más importante para ella es que soy feliz”, concluyó.