Shellie, conocida en las redes sociales como “La novia en serie”, es aficionada a las bodas y lo hizo por primera vez con su actual esposo, George, en Disneyland en 2015. Desde que fueron novios en la secundaria, tenían una conexión especial con el parque temático, que frecuentaban mientras su esposo asistía a la universidad en el sur de California.
De pequeña, Shellie nunca soñó con tener una gran boda. “No era la chica que fantaseaba con su vestido de novia o con las flores”, explicó a People. Sin embargo, después de que el día de su boda pasara en un abrir y cerrar de ojos, todo cambió.
“Cuando todo terminó, pensé: ‘¡Vaya! ¿Ya está? No pudimos comer ni bailar. El tiempo pasó tan rápido y ambos queríamos revivir el momento. Así que hicimos una ‘reedición’ de la boda en 2018. Pensé que sería el final. Pero no, me enganché. Me di cuenta de que era muy divertido”, dijo Shellie.
Así comenzó su adicción a las bodas y en 10 años de casados han renovado cuatro veces los votos y ya van por la quinta. Shellie y George no han dejado de decir “Sí, quiero”.
¿5 bodas adicionales en Disney?
La pareja ha organizado todas sus celebraciones en Disney, a las que se refieren como sus bodas adicionales, y su ceremonia más reciente tuvo lugar este año en un crucero del parque temático.
“Una de las cosas más geniales de ser ‘La novia en serie’ es que puedo cambiar de aires cada vez”, dice Shellie.
“Nunca es lo mismo. Tenemos diferentes personajes, diferentes comidas, diferentes lugares y diferentes invitados. Se trata de darle un toque especial a las cosas y divertirse con cada nueva celebración”, agregó.
Una boda diferente a otra
Según la revista People, la pareja celebró la primera recepción en el Animation Building dentro del parque California Adventure de Disneyland.
Para la segunda celebración, realizaron una sesión de fotos en Star Wars: Galaxy’s Edge del parque, con personajes de las películas y un espectáculo de sables de luz.
En otra ocasión, Shellie y George celebraron en Disneyland con los personajes Carl Fredricksen y Dug de Up incorporados a la boda.
Cada boda, un vestido
En cada evento Shellie compra un vestido nuevo y le pone nombre. Su objetivo es llegar a tener 26 vestidos, uno por cada letra del alfabeto.
Para mantener los costos bajo control, compra los vestidos en ventas de muestrarios. El más reciente, que usó para la ceremonia en el crucero de Disney, costó $600. Otro vestido que usó anteriormente, con capa incluida, lo compró en David’s Bridal por $800.
“Solo tenemos 10 invitados, pero hemos logrado que estas experiencias sean más íntimas”, comenta.
“Cambiamos la lista de invitados todo el tiempo y celebramos con diferentes personas. Algunos de mis amigos han oficiado y yo he tenido un oficiante diferente para cada renovación. Todas las personas que vienen ahora son grandes fanáticos de Disney”.
“No esperamos regalos ni nada parecido. Esto es lo nuestro y sólo queremos que vengan. Su presencia, en sí misma, es una bendición y nos sentimos muy bendecidos de que puedan venir. Así que pagamos su comida y otros gastos. Los tratamos como invitados normales [a una boda]”.
El tema de la boda, importante
Cuando planea otra boda, Shellie primero decide un tema y luego establece un presupuesto utilizando el sitio web de Disney , que ofrece varios paquetes de bodas. Asimismo, cuando se le pregunta cuánto ha gastado en todas las bodas juntas, no puede dar una cifra exacta. En cambio, describe los eventos como “inestimables”.
“Lo entiendo perfectamente. La gente lo ve y piensa: ‘Dios mío, esta chica es tan estúpida. ¿Cómo puede gastar tanto dinero? Prefiero invertir en una experiencia que cree recuerdos duraderos en mi corazón y en mi mente, en lugar de gastar dinero en artículos cotidianos como Starbucks o manicuras. Ahorro todos mis centavos para crear un recuerdo central con el hombre que amo. Si algunas personas no lo entienden, no hay problema. Puede que sea inusual, pero es lo que me hace feliz”.
Asegura que hay que desean ser invitados en la boda: “‘Me ofrezco como tributo. Por favor, invítenme’. Me encantaría poder invitarlos, pero, por supuesto, tengo un presupuesto limitado”, agrega.

