Antes teñirse el pelo era una necesidad, hoy preferimos aprender cómo hacer la transición a una melena con canas para olvidarnos de los retoques constantes, los duros gastos para el bolsillo y claro, tener un aspecto saludable, cuidado y natural.
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Cualquiera pensaría que se hace de manera abrupta dejando crecer las canas sin control, sin embargo, desde Clara apuntan otros tips más positivos para ello, pues así podrás darle a tu melena la paciencia necesaria para que vaya sobrepoblándose de pelos grisáceos, luciendo a la vez muy elegante y con look prolijo.
Cómo hacer la transición a una melena con canas elegante
Conforme con la misma fuente, el secreto para encontrar el equilibrio entre lo mejor de los dos mundos son las mechas. “En el momento que una clienta decide que quiere hacer una transición de un cabello normal a un cabello gris, siempre se le recomienda las mechas”, advierte la estilista, Montse Charro.
La razón de esto es que “no tiene color y estamos buscando que sea una transición a un gris natural”, aunque también apunta que hay otras que prefieren ser un poco más radicales y hacerse una decoloración.
“Podemos hacer una transición con una melena corta que ya tenga raíz haciendo diferentes tipos de mechas: finas, con gorro, con plata, etc., pero al fin y al cabo lo que siempre será más rápido es hacer una decoloración total del cabello”, asegura.
Con ello, se aclara el pelo hasta el punto de eliminar el pigmento, lo que sirve para “emparejar el tono de toda la melena con el de nuestras canas. Es un proceso que resultará más o menos agresivo para la fibra capilar en función del tono de base”, por lo que solo se recomienda para mujeres muy cautelosas con su tratamiento y mantenimiento.
“Si es muy oscura, vamos a seguir haciendo mechas supernórdicas. Nuestro objetivo es el gris, por lo que la mecha siempre tiene que ser muy clara”, aseguran sobre los tonos, que pueden variar desde el cenizo hasta el plata.