Una extraña escultura de cuatro metros de altura que representa al fallecido príncipe Felipe, el duque de Edimburgo, será retirada por considerarse “posiblemente la obra de arte de peor calidad”. La pieza supone una versión totalmente abstracta de cuatro metros de altura y realizada en material de bronce de Felipe de Edimburgo, esposo de la reina Isabel II, vestido con un birrete y la túnica de la Universidad de Cambridge con un rostro abstracto que recuerda “la máscara de un búho retorcida”, aseguran desde el medio The Guardian.
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La extraña estatua del príncipe Felipe que ha causado polémica desde su instalación en la ciudad de Cambridge
La pieza de arte llamada The Don fue diseñada para conmemorar los 35 años de rector de la Universidad, tuvo un costo de 150 mil libras y generó controversia desde su instalación en Hills Road junto al bloque de oficinas Charter House, propiedad de The Unex Group, sus promotores, y hasta ahora ningún artista ha reclamado autoría.
En un primer momento, los responsables de la obra de arte de cuatro metros de alturas responsabilizaron el trabajo al artista uruguayo Pablo Atchugarry, pero lo rechazó diciendo que era un “abuso” afirmar que había sido él.
La escultura será retirada por el Ayuntamiento de la ciudad de Cambridge
“No soy el autor de esta escultura y es un abuso que hayan usado mi nombre. Ojalá alguien me pidiera disculpas por este malentendido”, afirmó Atchugarry según recuenta Daily Mail.
The “Don” was never accepted and should not be here. We are now taking action to get it removed…
— Katie Thornburrow (@cllrkatie) March 21, 2024
Thanks to @GCSP_Planning
I’ve written more about it here. https://t.co/MSs8KlnYpg pic.twitter.com/uFyITnGZpx
El Ayuntamiento de Cambridge ha compartido un aviso para retirar de una vez por todas la estructura antes del 11 de agosto, no solo porque no otorgó el permiso para su instalación, sino también porque tiene “impacto material dañino” en la apariencia del área.
Según recoge el mismo medio británico, el presidente de Unex Group, Bill Gredley, calificó en su momento la pieza como “una obra de arte espectacular”.