Cuando se llega a los 50 años la principal preocupación de una mujer es verse bien, sin líneas de expresión y con un rostro fresco pero elegante.
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Un buen corte de cabello siempre logra que nuestro rostro cambie y si eres de esas mujeres arriesgadas, hay unos cortes que son beneficiosos para el rostro y las ayudará a lucir renovadas y elegantes.
Pixie
El corte Pixie, lo puedes llevar como el original o junto al estilo Undercout, que incluye un corte casi rapado en toda la zona baja.
Este look te ayudará a agregarle jovialidad a tu rostro y estilo, incluso será muy fácil de peinar y si lo llevas con tonos cenizas no tendrás que preocuparte por las canas.
Pixie largo con flequillo
El pixie también posee un estilo que tiende a ser un poco más largo y queda muy bien en las mujeres mayores a 50.
La mejor opción es llevarlo con un flequillo y un color marrón o miel, incluso es ideal para combinarlo con mechas que ayuden a crear suavidad en el estilo.
Este corte es un clásico para lograr un look fresco, dinámico y favorecedor.
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Corte en capas largas
Si tu rostro es alargado, uno de los looks que mejor te beneficiará es el corte en capas largas.
Además de mantener tu cabello largo, también le agregarás mucho volumen y tendrás un aspecto jovial.
Las capas van desde la zona media de la cabellera y hay ligeros cortes en la zona superior frontal.
Bob asimétrico
Se caracteriza por llevar el cabello uniformemente debajo de las orejas.
Sin embargo, existe un estilo asimétrico en el que el pelo más largo en la zona frontal, a la altura del mentón, mientras que la zona posterior queda a la altura del nacimiento del cabello.
Este corte le aporta un gran estilo de elegancia y firmeza a tu imagen. Inclusive, puedes llevarlo de lado o dividirlo a la mitad.
Curly Bob
La mejor opción a los 50 años será llevar el Curly Bob ligeramente escalado. Este corte se caracteriza por agregar mucho volumen, movimiento y un estilo desenfadado.
Será ideal para aportarle un aspecto renovado a tu imagen, pero debes conseguir el equilibrio perfecto entre un cabello peinado, pero no lleno de ondas muy marcadas.