El nombre de Cristina Scuccia sonó con mucha fuerza cuando ganó en 2014 el reality show The Voice en Italia. No era una persona común la que llegó al escenario para ser elegida y participar, se trataba de una monja que se convirtió en una cantante muy reconocida en el mundo.
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Además de su talento, el hecho de que fuera una monja sin duda generó cierta expectativa y popularidad de su figura.
Más de 90 millones de visitas tuvo su audición a ciegas en YouTube en menos de una semana. Sin duda, eso era una muestra del fenómeno que iba a ser Scuccia en internet.
Tocó la fama pero no dejó su hábito
La fama y el éxito la llevaron a participar en musicales como ‘Titanic’ y ‘Sister Act’; pero sin renunciar a su vida de religiosa.
Ese punto la llevó meses más tarde a que disminuyera su popularidad, pues sus obligaciones como religiosa eran su prioridad y se Alejó de los reflectores y abandonó su carrera musical.
Según el portal Play Ground, pasaron los años y no se supo más de ella.
Su Instagram tenía muy poca actividad y en las fotografías que subía se podía ver que estaba dedicada de lleno a sus labores en la iglesia católica.
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Lo dejó todo por la música
En noviembre de 2022 Cristina Scuccia sorprendió a todos al aparecer en la televisión en una entrevista con traje rojo, su cabello suelto y un piercing en la nariz. Un look muy diferente al traje convencional de monja que siempre usó en público.
Scuccia confirmó que después de meditarlo por muchos años tomó la decisión de dejar los hábitos y dedicarse de lleno a su carrera musical.
“Elegí seguir mi corazón sin pensar en lo que la gente diría de mí. Di un salto al vacío (…) Sor Cristina está dentro de mí. Soy la que soy gracias a Sor Cristina”, dijo en la entrevista.
Destacó que ya no se sentía “sincera” en el traje de monja y se retiró en medio de la pandemia del Covid-19.
Actualmente Cristina está trabajando como mesera en España mientras se va abriendo camino (nuevamente) en el mundo de la música y recibe apoyo psicológico.
