Después de una historia de amor que tuvo dos etapas, el pasado mes de agosto JLo y Ben Affleck se separaron definitivamente y es que la pareja decidió darle una segunda oportunidad a su romance que acabó en boda en 2022.
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No obstante, fuentes cercanas a los famosos indicaron altas incompatibilidades en su matrimonio que forzaron el divorcio, llevando a ambos a atravesar una amarga experiencia luego de reencontrarse y volverse a enamorar 17 años después de la primera vez, pues terminaron su primer compromiso en 2004.
Los errores de JLo y Ben Affleck que no deberíamos cometer al volver con un ex
No abordar la causa raíz de la ruptura
Si no se resuelven los problemas que causaron la separación en primer lugar, es probable que vuelvan a surgir en el futuro. Si ambos no trabajan en cambiar comportamientos dañinos que contribuyeron a la ruptura, es probable que la relación vuelva a fracasar, además, hay que ser conscientes de las incompatibilidades en valores, estilos de vidas, expectativas u objetivos cuando se está conociendo (o reconquistando) al otro.
No establecer límites claros
Es importante establecer expectativas y límites claros desde el principio para evitar malentendidos y conflictos en el futuro. La comunicación abierta y honesta es fundamental para una relación saludable. Ignorar problemas o emociones solo llevará a una acumulación de resentimiento, que se unirá a revivir el pasado de la primera etapa, discutiendo sobre resentimientos antiguos.
Idealizar la relación anterior
Recordar solo lo bueno de la relación pasada y no tener en cuenta las dificultades y problemas reales puede distorsionar la percepción de la relación y llevar a desilusiones.
Fuentes cercanas indicaron a People que el carácter de JLo “extremadamente sociable”, choca frontalmente con Ben Affleck, que es introvertido y reservado. De hecho, aseveran que tiene cambios de humor que hacen difícil el trato. “Quien él dijo que era y quién resultó ser eran dos personas muy diferentes”, declararon. La distancia física por sus compromisos sociales y la presión de la prensa y los paparazzi también favorecieron para volver a terminar.