Las series coreanas han dado mucho de que hablar a los espectadores de Netflix, por su buen contenido de drama y porque tratan problemas reales de la vida misma. Se trata de “Está bien no estar bien”, una producción que explora como la pandemia del Covid-19 afectó la salud mental de muchos en el mundo.
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La serie con 16 episodios con una duración aproximada de 1 hora y 20 minutos cada uno, es un drama con personajes que experimentan un profundo desarrollo emocional, pasan de ser individuos simples a complejos a medida que se revelan detalles de sus pasados.
La salud mental es el tema que aborda esta compleja serie, ya que a pesar de ser un problema que afecta a millones de personas alrededor del mundo, aún existen muchos tabús respecto a ello.
La salud mental y la incomprensión de la sociedad
La serie coreana “Está bien no estar bien” (2020) dirigida por Park Sin Woo y escrito por Jo Yong y protagonizada por los actores Kim Soo-hyun y Seo Ye-ji, relata el trasfondo de una variedad de padecimientos psiquiátricos que afectan al ser humano debido a la incomprensión de la sociedad ante las dificultades de la vida.
Con un relato que tiende a la inocencia y la fantasía, la serie exprime la más cruda realidad de la fama, el dinero, la guerra, el abuso, el maltrato infantil, el asesinato y otros hechos que provocan serios traumas en quienes los padecen.
Sin embargo, la producción también se detiene en quienes son los cuidadores, los familiares y los protectores de dichos pacientes, abordando un tema poco habitual que resalta el compromiso y amor entregado, con una vocación humana no muchas veces sentida y recompensada por la sociedad, reseña el portal BCN.
La obsesión y la negatividad
“Está bien no estar bien” narra la vida de Moon Gang Tae (interpretado por Kim Soo-hyun), un joven enfermero que se desempeña en un psiquiátrico mientras cuida a su hermano mayor, Sang Tae, quien vive con autismo.
La trama se desencadena cuando Gang Tae se cruza con Ko Moon-Young (interpretada por Seo Ye-Ji), una escritora de libros infantiles con una perspectiva negativa de la vida y una curiosidad obsesiva por él, desde el primer episodio, se revela que estos dos personajes comparten un trágico pasado y se conocieron en su infancia, aunque no lo recuerdan claramente.
Destaca El Heraldo que los protagonistas enfrentan grandes traumas del pasado que deben aprender a superar, ya sea juntos o por separado, a lo largo de la serie, este viaje de sanación y crecimiento personal se entrelaza con la representación compasiva de la vida en un entorno psiquiátrico, brindando a la audiencia una visión matizada de las luchas y triunfos relacionados con la salud mental.
Prepárate para este fin de semana ver esta serie que te mantendrá sentado en tu sillón, tocará fibras del corazón y te hará reflexionar sobre lo complejo que es el tema de la salud mental y cómo afrontarlo en la familia, en la pareja y en la vida misma.