La llegada de Internet sin duda cambió la forma en que vemos y vivimos el mundo, además con el auge de las redes sociales los videos y las fotos que se hacen virales están a la orden del día. Los memes son un perfecto ejemplo de como nos comunicamos actualmente, en un mundo más audiovisual en el que las palabras quedan reducidas a reacciones de emojis o rostros con expresiones graciosas.
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Entre los miles de memes que hay en la red hay uno que seguramente usted ha visto antes y quizá ha usado en una conversación con algún amigo o familiar, se trata de la imagen conocida como “O sea reatsiona”, que es protagonizado por una mujer afroamericana que con su cara desmuestra sorpresa e incredulidad sobre algo de lo que le están hablando. Usulmente se utiliza con el fin que dio origen a su nombre, hacerle entender a alguien que está comentiendo un error y debe recapacitar.
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Pues resulta que detrás de los memes hay personas que intencional o como suele ser en la mayoría de los casos, sin intención, terminan volviéndose famosas y con su cara rodando por todo el mundo. Este el caso de Keisha Johnson la protagonista del tan famoso meme, la mujer se ha referido a ella misma como: “Mi cara se veía fea, como si estuviera a punto de vomitar… Yo no me veo así en la vida real”.
Tanta fue la indignación de Keisha que quiso demandar a Instagram por 500 millones de dólares, argumentando que el uso de ese meme le había ocasionado burlas y bullying, lo que terminó afectando su vida, luego de ver que esta acción legal no funcionó como quería decidió aprovechar su popularidad y volverse reconocida, esta vez por su imagen real, ha sido tal su éxito que incluso la han contratado para hacer modelaje y campañas publicitarias.
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Y tal como ella indicó “no se ve así en la vida real” y es que si uno no supiera la historia, sería muy difícil creer que se trata de la misma mujer cuando ve las fotos que publica en su cuenta de Instagram, en donde sin ninguna duda hay que estar de acuerdo con ella y de la imagen del meme no queda mucho.