Un increíble hallazgo ocurrió en el área de Derinkuyu en Turquía, luego que un hombre que arreglaba el sótano de su casa encontrara por casualidad uno de los asentamientos de una de las ciudades subterráneas más grandes conocidas.
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Según consigna DW, el hecho ocurrió en una ciudad de Capadocia en Turquía. Allí, un hombre realizaba trabajos de renovación y ampliación en el sótano de su vivienda cuando al momento de martillar en un punto en particular, se abrió un resquicio hacia una de las ciudades subterráneas más impresionantes de la zona.
¿Cómo era la ciudad subterránea?
De acuerdo a lo informado por el citado medio, se trata de una ciudad subterránea compuesta por 18 niveles que alcanzaba los 76 metros de profundidad y en donde se podía albergar hasta a 20 mil personas.
Después del descubrimiento, el cual ocurrió en 1963, se determinó gracias a excavaciones que el lugar contaba con una serie de orificios de 10 centímetros de diámetro que tenían como función ser respiraderos.
Por medio de canalizaciones por los primeros dos niveles de las cuevas, se lograba conseguir suministro de aire respirable hasta al menos el octavo nivel.
Mientras que las cuevas que estaban en los niveles inferiores se utilizaban como bodegas o de celdas para los prisioneros.
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¿Para que se usaban las cuevas?
Las cuevas tenían como función ser una defensa contra las ciudades rivales. Pero también se estima que se trataba de refugios contra el clima extremo.
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Cabe mencionar que en la actualidad las ciudades subterráneas son una de las principales zonas visitadas por los turistas, en parte gracias al hombre que con su martillo abrió el portal hacia ese mundo.
